¿Qué protocolos avanzados de ciberseguridad deben impulsar las empresas de servicios profesionales?

En la actualidad, la ciberseguridad es un pilar fundamental para las empresas de servicios profesionales, que operan en un entorno donde las amenazas digitales evolucionan constantemente. Estas organizaciones, responsables de manejar grandes volúmenes de información confidencial, enfrentan el doble desafío de proteger datos críticos y mantener la confianza de sus clientes.

Desde oficinas de abogados hasta consultoras financieras, ninguna está exenta de las amenazas cibernéticas. Estas pueden incluir ransomware, phishing, ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS) y la explotación de vulnerabilidades en software administrativo. Por ello, adoptar protocolos de seguridad es esencial para garantizar la resiliencia y la continuidad operativa.

De acuerdo a la encuesta Global Digital Trust Insights 2024 de PwC, el porcentaje de empresas que han sufrido violaciones de datos con un costo superior al millón de dólares aumentó del 27% al 36%. Por otra parte, un informe de Accenture reveló que, en promedio, las organizaciones enfrentan 270 ataques cibernéticos al año, mientras que el 43% de los ciberataques tienen como víctimas a pequeñas y medianas empresas, muchas de las cuales carecen de los recursos necesarios para implementar medidas preventivas robustas. 

La transformación digital ha incrementado la superficie de ataque, ya que muchas compañías han adoptado soluciones en la nube, herramientas de colaboración remota y dispositivos IoT. Aunque estas tecnologías son fundamentales para la eficiencia y la productividad, también presentan nuevos desafíos de seguridad. Este panorama exige un enfoque proactivo y personalizado para mitigar riesgos, incluyendo la implementación de protocolos avanzados de ciberseguridad.

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¿Qué son los protocolos avanzados de ciberseguridad?

Los protocolos avanzados de ciberseguridad son un conjunto de medidas y procedimientos diseñados para proteger sistemas, redes y datos de ataques y accesos no autorizados. A diferencia de los protocolos básicos, como el uso de contraseñas robustas o antivirus, estos integran tecnologías sofisticadas, estrategias proactivas y medidas adaptativas para enfrentar amenazas complejas y en constante evolución.

Algunas de las estrategias más efectivas incluyen:

1. Autenticación de multifactor (MFA): este protocolo requiere de múltiples formas de verificación antes de conceder acceso a sistemas críticos. Estudios de Microsoft señalan que la MFA puede bloquear hasta el 99,9% de intentos de acceso no autorizados.
2. Segmentación de redes: la separación de sistemas y bases de datos internos en diferentes segmentos permite limitar el movimiento de los atacantes dentro de una red comprometida. 
3. Cifrado de datos: la codificación de información sensible asegura que, incluso si los datos son interceptados, no podrán ser leídos sin las claves de desencriptación. 
4. Sistemas de detección y respuesta (EDR): estas herramientas monitorizan constantemente la actividad en endpoints, permitiendo identificar y responder amenazas antes de que causen daños significativos.
5. Copias de seguridad y planes de recuperación: realizar copias de seguridad cada cierto tiempo, junto a un plan de recuperación ante desastres, ayudarán a que la empresa pueda reanudar sus operaciones rápidamente tras una vulneración. 

Aunque las tecnologías son fundamentales, el factor humano también es relevante para su efectivo cumplimiento. Un informe de Verizon reveló que el 82% de las brechas de datos involucran a las personas, ya sea por errores o por el engaño a empleados a través del phishing. Por ello, invertir en programas de formación y concientización es clave para educar a los colaboradores sobre cómo reconocer amenazas y seguir buenas prácticas en seguridad. 

Por ejemplo, los programas de simulación de ataques de phishing pueden preparar al personal y anticipar cuáles conductas de riesgo existen al interior de la organización. Asimismo, la adopción de políticas claras sobre el uso de equipos personales y el acceso remoto también son esenciales para reducir los riesgos. 

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La importancia de la resiliencia cibernética en las empresas

Además de la prevención, las empresas de servicios profesionales deben desarrollar resiliencia cibernética, es decir, la capacidad de mantener operaciones y seguir entregando servicios durante un evento cibernético crítico.

La adaptabilidad y agilidad son elementos clave de la resiliencia cibernética, ya que permiten a las organizaciones responder eficazmente a cualquier incidente. Mientras más tiempo pasa sin detectarse una brecha, más graves son las consecuencias.

Aprovechar soluciones de gestión de servicios de TI permite detectar ataques rápidamente, prevenir daños, evitar reparaciones costosas y conservar la confianza de los clientes. Invertir en ciberseguridad no solo protege a las empresas de pérdidas económicas y daños reputacionales, sino que también refuerza la confianza de sus clientes y asegura su competitividad en el mercado.

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Tecnoera, clave en el fortalecimiento de los protocolos de ciberseguridad avanzada

Contar con protocolos avanzados de ciberseguridad es una necesidad ineludible para las empresas de servicios profesionales que buscan proteger información sensible y mantenérmelos la confianza de sus clientes. Por esta razón, es vital contar con un partner tecnológico que le ayude a mantener las amenazas a raya.

Con sus 25 años en el mercado nacional, Tecnoera se posiciona como líder en soluciones cloud y telecomunicaciones para medianas y grandes empresas, mejorando la eficiencia, seguridad y productividad a través de servicios personalizados de Infraestructura como Servicio (IaaS) y Software como Servicio (SaaS), entregando además consultoría sectorial especializada, con un enfoque cercano y personalizado.

En materia de seguridad de la información, las soluciones de Tecnoera son clave para que tu empresa fortalezca sus protocolos de ciberseguridad avanzada y proteja los datos confidenciales de tus clientes. Mediante herramientas como encriptación, sistemas de prevención de pérdida de datos (DLP) y detección de amenazas avanzadas (XDR), garantizan la integridad y privacidad de la información frente a riesgos como phishing, ransomware y ataques de día cero. 

Además, facilitan el cumplimiento normativo con estándares como GDPR e ISO 27001, reduciendo riesgos legales. Estas soluciones incluyen monitoreo en tiempo real mediante SOC y sistemas SIEM, que detectan comportamientos anómalos y responden de manera proactiva, así como herramientas para asegurar el trabajo remoto, como firewalls, VPNs y autenticación multifactor (MFA). 

Tecnoera también ofrece planes de continuidad operativa y recuperación ante desastres (BCP/DRP) para minimizar el impacto de posibles incidentes, junto con capacitaciones al equipo interno para prevenir errores humanos. Su enfoque escalable y personalizado permite adaptar las soluciones a las necesidades específicas de tu empresa, fortaleciendo no solo su seguridad tecnológica, sino también la confianza de tus clientes.

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