Escrito por
Isabel Arrieta
Fecha de publicación
August 16, 2024
Los seres humanos buscamos historias que nos inspiren, motiven y nos permitan reflexionar acerca de nuestras propias pasiones. En esta oportunidad, vamos a profundizar en la historia de Eduardo Kovacs, un apasionado del mundo motor que ha logrado forjar una exitosa carrera en el Rally gracias al apoyo de su familia e inquebrantable deseo de superación.
En una reciente entrevista para el portal Tecnoera, compartió cómo su amor por el deporte tuerca ha sido una constante en su vida.
Proveniente de una familia con una larga tradición en las pistas -su abuelo, Eduardo Kovacs Jones comenzó a correr en los años 50, mientras que su padre Eduardo Kovacs Amengual, es un reconocido piloto que ganó una decena de títulos a nivel nacional e internacional- desde pequeño Eduardo “Guayo” Kovacs estuvo rodeado de motores, ruedas y carreras, despertando en él un profundo interés por las competiciones.
Aunque en un principio, su pasión fueron las motos, con el pasar de los años decidió dar el salto al Rally, deporte que hoy define gran parte de su vida.
“Provengo de una familia apasionada por el mundo motor, siempre apasionados por los deportes de dos y cuatro ruedas”, comentó Eduardo al inicio de la entrevista. Acto seguido, recordó sus inicios en las competencias de Enduro, en donde logró obtener tres campeonatos a nivel nacional.
Sin embargo, el Rally se cruzó en su camino de manera casi accidental, cuando un amigo le invitó a participar de una prueba. En ese momento, Eduardo se dio cuenta de que este deporte sería una parte esencial de su vida, decisión de la que nunca se ha arrepentido.
"Es un deporte muy lindo, en el que puedes tener contacto con la naturaleza y donde hay mucho compañerismo, además de disfrutar de toda la estrategia que implica cada carrera”, aseguró Eduardo. Esta mezcla de factores es lo que mantiene viva su pasión por este deporte durante años.
Sin duda, la familia ha jugado un papel fundamental en el desarrollo de su carrera. Su padre ha sido una fuente constante de motivación, aunque Kovacs destaca principalmente el apoyo incondicional que ha recibido de su señora, quien fue clave en su transición de las motos al rally. “Ella fue la que me dijo que tenía que hacerlo. Su apoyo ha sido crucial desde el principio”, recuerda.
Para Eduardo, el Rally se ha convertido en una forma de vida, debido a que la dedicación y el esfuerzo que requiere esta disciplina se extienden más allá de las pistas, influyendo en cada aspecto de su día a día. Su vida, trabajo y tiempo libre giran en torno al deporte, en donde cada viaje familiar, cada nuevo proyecto laboral está cuidadosamente planificado para permitirle entrenar, competir y prepararse para las próximas carreras.
Uno de los desafíos más importantes que enfrentará Eduardo este año es su participación en la única fecha del Campeonato Mundial de Rally (WRC) que se competirá en Sudamérica. El evento se realizará entre el 26 y 29 de septiembre en la Región del Biobío, siendo un espectáculo de clase mundial en donde vienen los mejores pilotos a recorrer la recta final de la carrera en el sur de nuestro país.
Esta competencia es uno de los mayores retos para cualquier piloto, ya que implica tres días de intensa competición, cubriendo más de 300 kilómetros. “Este año ha sido de una gran concentración y preparación para llegar lo mejor preparado posible a esa fecha del mundial”, dijo Eduardo. Para lograrlo, ha estado participando en diferentes carreras y pruebas para ajustar su auto, y asegurarse de que esté en las mejores condiciones para la competencia.
Y es que el Rally no solo requiere habilidad y destreza al volante, sino que también es un deporte que requiere de una gran capacidad de estrategia. Cada decisión, desde qué neumáticos usar hasta cuándo acelerar o reducir la velocidad, puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Eduardo explicó que una de las claves de este deporte es mantener la calma y la concentración, incluso cuando los tiempos no son los esperados. “Es fundamental planificar bien la carrera y no desesperarse si los tiempos no salen al comienzo. La carrera es larga y hay que asegurar cada paso”, reflexionó.
También la preparación física y mental es vital para un buen desempeño. Participar en una carrera de tres días resulta agotador tanto para el cuerpo como para la mente, por lo que “Guayo” sabe que debe estar en las mejores condiciones para enfrentar este reto. Parte de su preparación incluye visualizar la carrera, imaginar cada tramo y planificar sus movimientos con anticipación. Esta combinación de estrategia, resistencia física y mental, y pasión por el deporte es lo que le ha permitido destacarse en el Rally.
La innovación es un aspecto crucial en el Rally, ya que cada detalle puede marcar la diferencia en la competencia. Desde la tecnología utilizada en los autos hasta las estrategias con las que se enfrenta una carrera, la innovación está presente en cada detalle de este deporte. Por otro lado, la resiliencia es fundamental para superar los momentos difíciles y continuar adelante, incluso cuando las cosas no salen como se esperaba.
"La innovación y la resiliencia son valores fundamentales tanto en el deporte como en la vida", afirma Eduardo. Y en ese sentido, destacó el apoyo de auspiciadores como Tecnoera, no solo por el auspicio, sino que porque comparten con él esos valores claves.
Kovacs aseguró que el patrocinio de Tecnoera ha sido fundamental para seguir compitiendo. “Los auspicios son sumamente importantes en este deporte, ya que sin ellos sería imposible cubrir los costos de las carreras”, explicó. La colaboración con Tecnoera ha sido especialmente importante, permitiéndole enfrentarse a los desafíos del rally con mayor seguridad y confianza.
El mensaje de Eduardo para aquellos que sueñan con seguir sus pasiones es claro: con dedicación, esfuerzo y una actitud positiva, todo es posible. "Si uno se lo propone y trabaja para ello, puede lograr sus metas, sin importar las dificultades", señaló. Esta filosofía de vida, basada en el esfuerzo y la determinación, es la que ha guiado a Eduardo a lo largo de su carrera como piloto de rally y en su vida personal.